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Anglo American busca trasladar 48 millones de toneladas de residuos mineros desde Lo Barnechea a Colina

Vecinos y organizaciones reclaman ante el SEA para exigir revisión de seguridad independiente antes del traslado al tranque Las Tórtolas, en la comuna de Colina.

En abril de 2023, el Comité de Ministros del gobierno de Gabriel Boric aprobó la expansión del proyecto “Los Bronces Integrado” de Anglo American, pese a los daños atribuidos por su túnel bajo el glaciar La Paloma.

Para avanzar, la minera debe responder a más de 300 observaciones, entre ellas el retiro de los relaves Pérez Caldera I y II en Lo Barnechea. Estos depósitos representan un riesgo de colapso, como ocurrió en 1987, cuando estuvieron a punto de desbordarse por lluvias intensas.

La nueva polémica que involucra a la minera y su proyecto Los Bronces Integrado, surgió luego de que se conociera su intención de trasladar 48 millones de toneladas de residuos mineros desde el tranque Pérez Caldera, en Lo Barnechea, hasta el relave Las Tórtolas, ubicado en la comuna de Colina, sin incluir la Revisión Independiente de Seguridad de Presas (DSR), exigida por normativas internacionales y por el Decreto Supremo 248/2007 del SERNAGEOMIN.

Según consigna El Ciudadano, vecinos, organizaciones sociales y ambientales ingresaron este martes una reclamación ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) para frenar el avance del proyecto sin la debida revisión técnica. La medida busca garantizar que se evalúen adecuadamente los riesgos del traslado de estos desechos tóxicos y se proteja tanto al medioambiente como a las comunidades locales.

Riesgos ambientales y falta de transparencia

Los relaves Pérez Caldera I y II, cuyo retiro fue ordenado desde 1989 y debía concretarse en un plazo de 25 años que venció en 2015, representan un riesgo geológico y ambiental relevante. Están ubicados sobre la cuenca del río San Francisco, afluente del Mapocho, en una zona cercana a la falla geológica de San Ramón, una fractura activa con potencial sísmico.

En invierno de 1987, el tranque estuvo a solo 50 centímetros de su capacidad máxima, obligando a evacuar el sector por peligro de colapso. Además, estos relaves no cuentan con una geomembrana de protección, lo que permitiría la filtración de contaminantes hacia las napas subterráneas, afectando potencialmente la salud humana, el agua potable y el ecosistema regional.

Colina en el foco: las dudas sobre Las Tórtolas

El material sería transportado mediante un ducto hasta el relave Las Tórtolas, en Colina, que ya se encuentra con un 45% de su capacidad ocupada. La propuesta fue ingresada al SEA mediante una Declaración de Impacto Ambiental (DIA), la cual ha sido criticada por no incluir la DSR, un estándar requerido en proyectos de este tipo a nivel internacional, según consigna El Ciudadano.

Desde el movimiento MODATIMA, su vocero nacional Cristóbal Rodríguez señaló: “Este proyecto demuestra que no existe la minería sostenible cuando se omiten riesgos evidentes y se presenta como una operación inocua el traslado de millones de toneladas de desechos contaminantes”.

La presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Lo Barnechea, Margarita Carrasco, también expresó su preocupación: “Necesitamos evaluar los riesgos reales antes de autorizar esta remoción. Está en juego la salud ambiental y la seguridad de nuestras comunidades”.

Historial de conflictos: glaciar La Paloma y túnel sin evaluación

La desconfianza en las acciones de Anglo American no es nueva. El proyecto ya ha sido cuestionado por sus impactos en el glaciar La Paloma y por la construcción del túnel Los Sulfatos, ejecutado entre 2008 y 2011 sin contar con una evaluación ambiental, pese a que cumplía con causales de obligatoriedad legal.

Expertas como la geóloga Verónica Oliveros, académica de la Universidad de Concepción, han cuestionado la objetividad de los informes utilizados por SERNAGEOMIN, señalando que fueron elaborados por empresas vinculadas históricamente a la minera.

Un llamado a la evaluación independiente

Las comunidades exigen que se incorporen criterios técnicos imparciales y científicos para evaluar los efectos sinérgicos del traslado masivo de residuos. La exigencia principal es clara: incluir la Revisión Independiente de Seguridad de Presas (DSR) en el proceso de evaluación ambiental, como garantía mínima para proteger la salud pública y los ecosistemas de la zona.

CHH