Miles de personas se tomaron las calles de Los Ángeles y otras ciudades en rechazo a las redadas masivas contra migrantes indocumentados y al inesperado despliegue de tropas de la Guardia Nacional, ordenado por el presidente Donald Trump. Las manifestaciones han dejado decenas de detenidos y escenas de fuerte represión, con uso de gases lacrimógenos y enfrentamientos en autopistas bloqueadas por los manifestantes.
En medio de las protestas, una reportera australiana que cubría en vivo los disturbios en el centro de Los Ángeles fue alcanzada en la pierna por un proyectil no letal disparado por un policía. El momento quedó registrado en video y generó críticas sobre el actuar de las fuerzas de seguridad. “Estamos a salvo, pero esta es una de las duras realidades de informar desde el terreno”, dijo la periodista tras el incidente.
La tensión se ha intensificado con la presencia de soldados armados en instalaciones federales. Desde la oposición acusan al gobierno de escalar innecesariamente el conflicto y criminalizar a comunidades migrantes.
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